IMPARCIALIDAD
Para intentar demorar el juicio por el robo de bebés en la dictadura, los acusados acuden a todo tipo de chicanas. El dictador Reynaldo Bignone, por caso, recusó al fiscal Félix Crous con el argumento de que no garantizaba la “imparcialidad”, ya que las posiciones del funcionario demostraban “odio y animosidad” contra las Fuerzas Armadas. En una audiencia realizada en Comodoro Py, Crous le explicó personalmente al abogado del represor, Juan María Aberg Cobo, que el rol del fiscal es representar el interés de las víctimas. “Comprendo las dificultades de ciertos sectores para internalizar las reglas del juego democrático, en especial las de aquellos para los cuales el único debido proceso conocido es la mesa de torturas”, ironizó Crous.
Para intentar demorar el juicio por el robo de bebés en la dictadura, los acusados acuden a todo tipo de chicanas. El dictador Reynaldo Bignone, por caso, recusó al fiscal Félix Crous con el argumento de que no garantizaba la “imparcialidad”, ya que las posiciones del funcionario demostraban “odio y animosidad” contra las Fuerzas Armadas. En una audiencia realizada en Comodoro Py, Crous le explicó personalmente al abogado del represor, Juan María Aberg Cobo, que el rol del fiscal es representar el interés de las víctimas. “Comprendo las dificultades de ciertos sectores para internalizar las reglas del juego democrático, en especial las de aquellos para los cuales el único debido proceso conocido es la mesa de torturas”, ironizó Crous.
en Página12
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