Libertad de Expresion
Detenidos Aparecidos
Las Madres participaron de la presentación en la Biblioteca Nacional
Se presentó el libro “Detenidos Aparecidos”, de Santiago Garaño y Werner Pertot en la Sala Jorge Luis Borges de la Biblioteca Nacional. A través de testimonios de presos políticos, entre 1972 y 1989, un análisis del sistema penitenciario y su relación con los centros clandestinos de detención, se narra la experiencia de la militancia tras las rejas. Con prólogo de Pilar Calveiro y epílogo de Alcira Daroqui, es el segundo libro que editan de forma conjunta luego de La otra juvenilia. Militancia y represión en el Colegio Nacional de Buenos Aires. 1971-1986 (2002).Liliana Daunes abrió junto a Esteban Morgado en guitarra la presentación con la lectura de un poema de Juan Gelman que recuerda la masacre de Trelew. “Estos libros nos ayudan a que la vida, la historia, el futuro, nuestros hijos, ocupen el lugar que les corresponde” fue la reflexión de Esteban Morgado que interpretó tangos.Liliana Daunes recordó que la masacre de Trelew es el antecedente de lo que sería el Terrorismo de Estado en nuestro país, instalando la vía, cárcel, asesinato y ocultamiento. Mecanismos que se repiten en las cárceles de Margarita Belén, de Palomitas, en los pabellones de la muerte de La Plata y los fusilamientos del penal de Córdoba. La foto que ilustra la tapa del libro pertenece a la fotógrafa y militante del PRT-ERP, Alicia Sanguinetti. Fue detenida en 1970, y participó en 1972 de la toma del penal de Rawson. Compartió con la audiencia cómo llegó a sacar las fotos. “Mi hermano me pasó la cámara. Se olía una especie de libertad en el Penal, todos nosotros sabíamos que posiblemente salíamos y nos reinsertábamos en la militancia. Esa mañana hubo visita en el Penal, estaba mucho más relajado el tema de las guardias. Supongo que los carceleros estaban pensando”por suerte nos sacamos a todos estos de encima y se van, otros habrán pensado mejor portémonos bien a ver si en un futuro toman represalias”. Y así fue cómo llegó la cámara a mis manos. En ese momento yo estaba entre sacar fotos o seguir cosiendo las banderas, por eso saqué pocas fotos y al día siguiente entregué la cámara. Cuando la situación se empezó a poner complicada, mamá enterró cartas de mis compañeros y el rollo. Fueron desenterrados en 1983 del jardín de una familia vecina. Muchos de los compañeros que aparecen en las tomas, ya no están. Es por esto mismo, que es muy importante que estén en este libro”.El texto relaciona la situación de los presos políticos en dictadura y en la actualidad. Analiza la función del sistema penitenciario en coacción con el Terrorismo de Estado, demostrando que las cárceles complementaron, de alguna manera, el circuito de los centros clandestinos.
Las Madres participaron de la presentación en la Biblioteca Nacional
Se presentó el libro “Detenidos Aparecidos”, de Santiago Garaño y Werner Pertot en la Sala Jorge Luis Borges de la Biblioteca Nacional. A través de testimonios de presos políticos, entre 1972 y 1989, un análisis del sistema penitenciario y su relación con los centros clandestinos de detención, se narra la experiencia de la militancia tras las rejas. Con prólogo de Pilar Calveiro y epílogo de Alcira Daroqui, es el segundo libro que editan de forma conjunta luego de La otra juvenilia. Militancia y represión en el Colegio Nacional de Buenos Aires. 1971-1986 (2002).Liliana Daunes abrió junto a Esteban Morgado en guitarra la presentación con la lectura de un poema de Juan Gelman que recuerda la masacre de Trelew. “Estos libros nos ayudan a que la vida, la historia, el futuro, nuestros hijos, ocupen el lugar que les corresponde” fue la reflexión de Esteban Morgado que interpretó tangos.Liliana Daunes recordó que la masacre de Trelew es el antecedente de lo que sería el Terrorismo de Estado en nuestro país, instalando la vía, cárcel, asesinato y ocultamiento. Mecanismos que se repiten en las cárceles de Margarita Belén, de Palomitas, en los pabellones de la muerte de La Plata y los fusilamientos del penal de Córdoba. La foto que ilustra la tapa del libro pertenece a la fotógrafa y militante del PRT-ERP, Alicia Sanguinetti. Fue detenida en 1970, y participó en 1972 de la toma del penal de Rawson. Compartió con la audiencia cómo llegó a sacar las fotos. “Mi hermano me pasó la cámara. Se olía una especie de libertad en el Penal, todos nosotros sabíamos que posiblemente salíamos y nos reinsertábamos en la militancia. Esa mañana hubo visita en el Penal, estaba mucho más relajado el tema de las guardias. Supongo que los carceleros estaban pensando”por suerte nos sacamos a todos estos de encima y se van, otros habrán pensado mejor portémonos bien a ver si en un futuro toman represalias”. Y así fue cómo llegó la cámara a mis manos. En ese momento yo estaba entre sacar fotos o seguir cosiendo las banderas, por eso saqué pocas fotos y al día siguiente entregué la cámara. Cuando la situación se empezó a poner complicada, mamá enterró cartas de mis compañeros y el rollo. Fueron desenterrados en 1983 del jardín de una familia vecina. Muchos de los compañeros que aparecen en las tomas, ya no están. Es por esto mismo, que es muy importante que estén en este libro”.El texto relaciona la situación de los presos políticos en dictadura y en la actualidad. Analiza la función del sistema penitenciario en coacción con el Terrorismo de Estado, demostrando que las cárceles complementaron, de alguna manera, el circuito de los centros clandestinos.
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