GANÓ LA MEMORIA

La memoria y la cultura le ganan terreno al horror en un ex centro clandestino de la dictadura
En el predio donde funcionó "El Olimpo", en Floresta, se inauguró una biblioteca pública focalizada en derechos humanos y ciencias sociales. La colección también incluye libros prohibidos por las autoridades militares. La iniciativa es parte de un proyecto para recuperar el lugar, que alojó a 400 detenidos entre 1978 y 1979, y que fue traspasado hace dos años por la Nación a la Ciudad.

Las ventanas muestran en detalle los grises galpones, sinónimo de un pasado de horror que emerge a cada momento. Adentro, libros y estantes regalan una imagen tan luminosa como la tarde de sábado que muestra Floresta. No es para menos: en pleno corazón de "El Olimpo", un ex centro clandestino de detención de la dictadura, se acaba de inaugurar una biblioteca pública especializada en derechos humanos y ciencias sociales. La iniciativa es parte de un amplio proyecto para recuperar el predio, impulsado por una mesa de trabajo que agrupa a organismos de derechos humanos, organizaciones barriales y el Gobierno porteño. "Buscamos que la biblioteca sirva, además, como punto de partida para la producción de conocimientos que sirvan para interpretar nuestro pasado y presente", cuenta Ariel, uno de los encargados. La colección, especializada en derechos humanos y ciencias sociales, también incluye un apartado dedicado a los libros prohibidos durante la dictadura. "Nos pareció que era una buena idea para darle una entidad particular", dice María Eugenia, también responsable de la biblioteca, que alberga a casi mil volúmenes, espera nuevas donaciones y en un principio funcionará entre las 10 y las 17. En el predio, situado en Lacarra y Ramón Falcón, se realizan regularmente ciclos de cine, recitales y debates. "La idea es darle vida al lugar, queremos que también sea un punto de referencia para el barrio", agrega Ariel. A tono con ese concepto, en los próximos meses se espera poner en marcha un grupo de teatro dedicado a interpretar obras prohibidas por las autoridades militares. Y también se planea un mural gigante sobre la pared que da a la avenida Olivera. "El Olimpo" funcionó entre agosto de 1978 y enero de 1979, bajo la órbita del Primer Cuerpo de Ejército. Por el predio -en principio cochera de tranvías- pasaron cerca de 400 detenidos, que fueron sometidos a feroces sesiones de tortura. Sólo 50 lograron sobrevivir. El horror llegó al cine a través de la película "Garage Olimpo", de Marco Bechis. Luego de una larga lucha vecinal, impulsada entre otros por los "Vecinos por la Memoria" de Floresta y Parque Avellaneda, "El Olimpo" pasó a manos del Gobierno porteño en junio de 2005, tras ser ocupado por la Policía Federal. Poco después, en noviembre, el predio fue abierto por primera vez en su totalidad al público, en una conmovedora recorrida que tuvo como guías a detenidos durante la dictadura.

Clarín