España: Recuperar la Memoria Histórica
Madrid/Laura Corvo en RadioNederland
11-10-2007
Luz verde para la Ley de extensión de derechos a los afectados por la Guerra Civil y la Dictadura, más conocida como la Ley de Memoria Histórica en España. Esta semana y tras duras negociaciones, el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero ha conseguido "el desbloqueo definitivo" para la tramitación del texto, que será aprobado antes de finales de año.
Un total de 7 grupos parlamentarios han dado el visto bueno al acuerdo, que se propone reparar los daños de la Guerra Civil Española y la Dictadura franquista (1936-1975). Han tenido que pasar décadas para que el pueblo español adquiera ese derecho a recordar. Sin embargo, todavía hay quienes se niegan a aceptar las disposiciones propuestas por el Gobierno.
Las bases de la ley serán, entre otras, el reconocimiento de las víctimas de la Guerra Civil de ambos bandos, la condena del franquismo, la apertura de fosas comunes, la ilegalización de los tribunales de guerra y sus respectivas sentencias y la retirada de símbolos de exaltación afines al régimen del dictador Francisco Franco.
Décadas en el olvido
Madrid/Laura Corvo en RadioNederland
11-10-2007
Luz verde para la Ley de extensión de derechos a los afectados por la Guerra Civil y la Dictadura, más conocida como la Ley de Memoria Histórica en España. Esta semana y tras duras negociaciones, el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero ha conseguido "el desbloqueo definitivo" para la tramitación del texto, que será aprobado antes de finales de año.
Un total de 7 grupos parlamentarios han dado el visto bueno al acuerdo, que se propone reparar los daños de la Guerra Civil Española y la Dictadura franquista (1936-1975). Han tenido que pasar décadas para que el pueblo español adquiera ese derecho a recordar. Sin embargo, todavía hay quienes se niegan a aceptar las disposiciones propuestas por el Gobierno.
Las bases de la ley serán, entre otras, el reconocimiento de las víctimas de la Guerra Civil de ambos bandos, la condena del franquismo, la apertura de fosas comunes, la ilegalización de los tribunales de guerra y sus respectivas sentencias y la retirada de símbolos de exaltación afines al régimen del dictador Francisco Franco.
Décadas en el olvido
Muchas familias españolas llevan años en silencio, conscientes de la injusticia, pero sin posibilidad de reclamar lo que les pertenece, lo que perdieron, lo que nunca podrán recuperar. Desde que el Partido Socialista planteara esta iniciativa, hace ya más de dos años, insistió en la idea de reparar el dolor y la injusticia a través del consenso político y social.
Y ahora, 70 años después del inicio de la Guerra Civil Española, provocada por el Golpe de Estado efectuado, el 18 de Julio de 1936, a la democráticamente instituida II República, no sólo debemos hablar de los horrores de un conflicto, sino de las secuelas del mismo y de los más de 40 años de dictadura franquista. Porque aún hoy, aquellos que por defender unos valores y unas ideas determinadas, que sufrieron la cárcel, la represión, el exilio o la muerte, no han cerrado ese capítulo de la historia. Ni ellos ni sus familiares: aquí hoy se sigue hablando de "vencedores y vencidos". El silencio y el miedo marcaron a aquellos que sobrevivieron la guerra y que, durante el régimen autoritario del caudillo Francisco Franco se vieron obligados a no mirar atrás. Luego, con la llegada de la Transición democrática, muchos pensaron que lo mejor era no remover el pasado y se centraron los esfuerzos en recuperar la libertad y el Estado de Derecho. Pero la reconciliación y la justicia quedaron pendientes.
Por eso, uno de los puntos más calientes y que más se ha reclamado desde diversas instituciones, es el tema de las "fosas comunes", lugares apartados, generalmente en un camino perdido, donde se enterraba en masa a los fusilados. La apertura de estas fosas, donde aún descansan los restos de cientos de personas represaliadas por el régimen de Franco, quedaría garantizada con la aprobación definitiva de ésta ley. Hasta ahora, las pocas exhumaciones que se han llevado a cabo, habían sido realizadas por entidades privadas, con la ayuda de diversas asociaciones y de voluntarios. De hecho, es precisamente en este movimiento ciudadano, ajeno a cuestiones partidistas, dónde se encuentra el origen de la Ley que ahora se debate.
En el año 2000, el periodista Emilio Silva comenzó a investigar el lugar donde habían asesinado a su abuelo, militante de un partido de izquierdas, en 1936. A partir de esta exhumación, comenzaron a recogerse testimonios y, poco después, se instituía la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica, un proyecto que trata de rescatar a todos los olvidados de la Guerra Civil y la dictadura franquista y que, desde entonces, ha trabajado sin descanso en esta línea.
Rechazo a la Ley
Y ahora, 70 años después del inicio de la Guerra Civil Española, provocada por el Golpe de Estado efectuado, el 18 de Julio de 1936, a la democráticamente instituida II República, no sólo debemos hablar de los horrores de un conflicto, sino de las secuelas del mismo y de los más de 40 años de dictadura franquista. Porque aún hoy, aquellos que por defender unos valores y unas ideas determinadas, que sufrieron la cárcel, la represión, el exilio o la muerte, no han cerrado ese capítulo de la historia. Ni ellos ni sus familiares: aquí hoy se sigue hablando de "vencedores y vencidos". El silencio y el miedo marcaron a aquellos que sobrevivieron la guerra y que, durante el régimen autoritario del caudillo Francisco Franco se vieron obligados a no mirar atrás. Luego, con la llegada de la Transición democrática, muchos pensaron que lo mejor era no remover el pasado y se centraron los esfuerzos en recuperar la libertad y el Estado de Derecho. Pero la reconciliación y la justicia quedaron pendientes.
Por eso, uno de los puntos más calientes y que más se ha reclamado desde diversas instituciones, es el tema de las "fosas comunes", lugares apartados, generalmente en un camino perdido, donde se enterraba en masa a los fusilados. La apertura de estas fosas, donde aún descansan los restos de cientos de personas represaliadas por el régimen de Franco, quedaría garantizada con la aprobación definitiva de ésta ley. Hasta ahora, las pocas exhumaciones que se han llevado a cabo, habían sido realizadas por entidades privadas, con la ayuda de diversas asociaciones y de voluntarios. De hecho, es precisamente en este movimiento ciudadano, ajeno a cuestiones partidistas, dónde se encuentra el origen de la Ley que ahora se debate.
En el año 2000, el periodista Emilio Silva comenzó a investigar el lugar donde habían asesinado a su abuelo, militante de un partido de izquierdas, en 1936. A partir de esta exhumación, comenzaron a recogerse testimonios y, poco después, se instituía la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica, un proyecto que trata de rescatar a todos los olvidados de la Guerra Civil y la dictadura franquista y que, desde entonces, ha trabajado sin descanso en esta línea.
Rechazo a la Ley
Esta intención de llevar a buen término el proyecto de ley para la recuperación de la Memoria Histórica, ha sido duramente criticada por el Partido Popular, líder de la oposición al Gobierno, que ha acusado abiertamente al Ejecutivo de intentar dividir a la sociedad y reabrir "viejas heridas", argumento que les ha servido como excusa para volver a negar su apoyo a una ley necesaria y social promovida por el Gobierno de España. Sin embargo, los populares sí han apoyado la inminente beatificación de 498 mártires religiosos de la Guerra Civil, que se celebrará el próximo 28 de octubre en la plaza de San Pedro de Roma. La Iglesia, por su parte, ha intentado aclarar que la beatificación no es una respuesta al proyecto de ley de Memoria Histórica
Muchos piensan que el Partido Popular, de ideología conservadora, se ha negado a apoyar la ley porque teme que se descubra la relación de algunos de sus dirigentes con el régimen franquista. De hecho, por todos es sabido que uno de sus fundadores fue ministro del régimen dictatorial, Manuel Fraga. Desde los medios de comunicación españoles no se ha incidido en éstas cuestiones, pero en algunos medios internacionales se explica la negativa del Partido Popular a través de estos hechos.
Esquerra Republicana de Catalunya, el partido nacionalista de izquierdas catalán, también se ha opuesto a la ley, aunque por motivos muy diferentes: piensan que la propuesta "se queda corta" y que "no avalarán una Ley de Memoria Histórica que no anule los juicios del franquismo, porque de no hacerlo se estará dando validez a una justicia que no fue tal, sino que fue una venganza", ha afirmado su portavoz.
Escribiendo la memoria
Muchos piensan que el Partido Popular, de ideología conservadora, se ha negado a apoyar la ley porque teme que se descubra la relación de algunos de sus dirigentes con el régimen franquista. De hecho, por todos es sabido que uno de sus fundadores fue ministro del régimen dictatorial, Manuel Fraga. Desde los medios de comunicación españoles no se ha incidido en éstas cuestiones, pero en algunos medios internacionales se explica la negativa del Partido Popular a través de estos hechos.
Esquerra Republicana de Catalunya, el partido nacionalista de izquierdas catalán, también se ha opuesto a la ley, aunque por motivos muy diferentes: piensan que la propuesta "se queda corta" y que "no avalarán una Ley de Memoria Histórica que no anule los juicios del franquismo, porque de no hacerlo se estará dando validez a una justicia que no fue tal, sino que fue una venganza", ha afirmado su portavoz.
Escribiendo la memoria
Memoria individual y memoria colectiva. El derecho a olvidar y el deber de recordar. Sobre éste tema que hoy está tan de actualidad en España, conversaron la tarde del domingo varios escritores iberoamericanos en Casa de América, en el marco del Festival Vivamérica.
La reflexión sobre el presente Iberoamericano, sobre la actualidad de los pueblos, nos obliga inexorablemente a mirar hacia atrás, a descubrir el pasado y rescatar la memoria. Rescribir esas páginas en blanco que nos pertenecen a todos.
Y para hablar sobre el proceso de la Memoria Histórica y su estado actual, nadie mejor que española Almudena Grandes, quien acaba de publicar "El Corazón Helado", una novela que profundiza en el pasado y el presente de los españoles. Un viaje personal hacia las raíces de la historia más reciente de éste país marcado por el silencio y el olvido. La escritora concedió una entrevista a Radio Nederland donde deja clara su postura: "Creo que la situación española es atípica, no se parece a ninguna otra, a pesar de que algunos países de América Latina han pasado por situaciones parecidas, pero se han resuelto mucho más deprisa en el tiempo que la española", afirma la escritora, "El hecho de que ahora estemos mucho más cerca de la Guerra Civil que hace 30 años, es una particularidad muy específica".
Respecto a la postura que mantienen los partidos políticos que no han apoyado la Ley de Memoria Histórica, la escritora española Almudena Grandes se muestra especialmente preocupada: "40 años de dictadura no se borran haciendo una raya en el suelo y saltando al otro lado, por mucho que algunos lo intenten", asegura, "Aunque yo en este tema soy optimista porque es muy evidente que el relato oficial de lo que ocurrió dista mucho de la situación constitucional y filosófica del Estado Español ahora mismo. Las heridas no se han curado porque no se han abierto. Es muy curiosa la situación del Partido Popular: no creo que haya ningún partido democrático que sea capaz de alinearse, siquiera simbólicamente, con un Golpe de Estado que acabó con una democracia similar a la que sostienen ellos ahora mismo".
La reflexión sobre el presente Iberoamericano, sobre la actualidad de los pueblos, nos obliga inexorablemente a mirar hacia atrás, a descubrir el pasado y rescatar la memoria. Rescribir esas páginas en blanco que nos pertenecen a todos.
Y para hablar sobre el proceso de la Memoria Histórica y su estado actual, nadie mejor que española Almudena Grandes, quien acaba de publicar "El Corazón Helado", una novela que profundiza en el pasado y el presente de los españoles. Un viaje personal hacia las raíces de la historia más reciente de éste país marcado por el silencio y el olvido. La escritora concedió una entrevista a Radio Nederland donde deja clara su postura: "Creo que la situación española es atípica, no se parece a ninguna otra, a pesar de que algunos países de América Latina han pasado por situaciones parecidas, pero se han resuelto mucho más deprisa en el tiempo que la española", afirma la escritora, "El hecho de que ahora estemos mucho más cerca de la Guerra Civil que hace 30 años, es una particularidad muy específica".
Respecto a la postura que mantienen los partidos políticos que no han apoyado la Ley de Memoria Histórica, la escritora española Almudena Grandes se muestra especialmente preocupada: "40 años de dictadura no se borran haciendo una raya en el suelo y saltando al otro lado, por mucho que algunos lo intenten", asegura, "Aunque yo en este tema soy optimista porque es muy evidente que el relato oficial de lo que ocurrió dista mucho de la situación constitucional y filosófica del Estado Español ahora mismo. Las heridas no se han curado porque no se han abierto. Es muy curiosa la situación del Partido Popular: no creo que haya ningún partido democrático que sea capaz de alinearse, siquiera simbólicamente, con un Golpe de Estado que acabó con una democracia similar a la que sostienen ellos ahora mismo".
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